"La Humanidad no encontrará la paz hasta que no se vuelva con confianza a mi Misericordia" (Diario de Sor Faustina, 300)

miércoles, 11 de septiembre de 2013

Jesús no dará la recompensa por el resultado de la obra sino por la voluntad sincera y el esfuerzo hecho



"Oh Jesús mío, Tu ves que Tu santa voluntad es todo para mi. Me es indiferente lo que hagas de mi: me ordenas ponerme a la obra, lo hago con tranquilidad, a pesar de saber que no soy idónea para esto; me haces esperar por medio de Tus sustitutos, así pues, espero con paciencia; llenas mi alma de entusiasmo, y no me das la posibilidad de obrar; me atraes detrás de Ti a los cielos, y me dejas en la tierra; infundes en mi alma el anhelo de Ti, y Te escondes de mi.

Muero por el deseo de unirme Contigo por la eternidad, y no permites a la muerte acercarse a mí. Oh voluntad de Dios, Tu eres mi alimento y el deleite de mi alma; cuando me someto a la santa voluntad de mi Dios, un abismo de paz inunda mi alma.

Oh Jesús mío, Tu no das la recompensa por el resultado de la obra, sino por la voluntad sincera y el esfuerzo emprendido; por lo tanto estoy completamente tranquila, aunque todas mis iniciativas y mis esfuerzos quedaran frustrados ni fueran realizados jamás. Si hago todo lo que está en mi poder, lo demás no es cosa mía y por eso las mas grandes tempestades no perturban la profundidad de mi paz.
En mi conciencia reside la voluntad de Dios"

(D. 952)

No hay comentarios:

Publicar un comentario